miércoles, 22 de diciembre de 2021

Lección 35, Octavo Grado, Tercera Orden

 "Ciencia Ficción, Fantasía y Cuentos Chinos"


-De la elucubración y la especulación al postulado racional de hipótesis, teorías y leyes-


Algunos se preguntarán el por qué un individuo tan pragmático y poco dado a la Fantasía, como nosotros, puede aceptar tan extrañas especulaciones, hipótesis y teorías espirituales. Bien, la contestación es la Intuición, la lógica y la constatación de que siempre es la idea más simple, factible y razonable, la que resulta cierta.


El tener la constancia de la Existencia de "Dios" y de la "Inmortalidad del Alma", aunque se crea lo contrario, no es una mera creencia sino un sentimiento, una emoción y una certeza, Fe, de que eso es así y que, aunque no lo fuese, si fuese útil mantener esa actitud, es infinitamente mejor tenela que mantener un vacío existencial tendente a la deshumanización, la depresión y la generación de ideas suicidas.


El Pensamiento es el siguiente: ¿Pierdo algo aceptando ese sentimiento?. Si la respuesta es no, pasa al siguiente nivel. ¿Gano algo aceptando ese pensamiento? Si es que sí, es más que probable que la idea sea correcta y si no lo es, tampoco importa demasiado, pues nos habrá servido para vivir ilusionados en algo y se podrá complementar o modificar, de camino, cuando se haya obtenido un mayor conocimiento.


Si después de muerto, esa idea es incorrecta nos dará exactamente lo mismo pues estamos muertos y no tendremos consciencia de ello. Si, por el contrario, esa idea es correcta, nos alegraremos de haber tenido razón y no nos lamentaremos de haber tenido una vida desilusionante y sin objetivos.


Pero repito, no es cuestión de decirnos, voy a creer en esto o en aquello y no voy a dejar de creer en otras cosas. La idea debe de aceptarse como una certeza y una verdad que, no solo no es absoluta, sino que está abierta a diversas posibilidades. No estamos hablando de un sentimiento cerrado como es el fanatismo.


La Fantasía es absolutamente irracional, como los milagros, pues rompen el funcionamiento de las leyes físicas de la naturaleza, lo cual es imposible. La Ciencia Ficción, estricta y no fantástica, es racional y juega con ciertos supuestos probables y lógicos. Los cuentos chinos, por el contrario, solo sirven para engañar a imbéciles capaces de creerse cualquier cosa, como que un elefante pueda volar o que una mujer pueda convertirse en una pantera devoradora de hombres.


Los cuentos chinos de Papá Noel y los Reyes Magos, provocan una poderosa ilusión fantástica en los niños; pero nunca se ha estudiado la tremenda frustración que debe de ocasionar a los niños cuando descubren que todo era una mentira. Una mentira, creada por la Sociedad, para alegrar, de forma pasajera, a los infantes; pero también para adoctrinarlos y prepararlos para que aprendan a aceptar, de adultos, mentiras impuestas, por la Sociedad, menos irracionales.


La existencia de un Dios o diversos dioses son meras creencias con fundamentación meramente teológica; pero la sensación de la existencia de una Inteligencia Consciente, de características desconocidas, detrás de la Existencia, es una evidencia basada en la Lógica y en la Razón.


Con la pervivencia del Alma detrás de la Muerte sucede otro tanto de lo mismo; es decir, el cielo, el purgatorio, la reencarnación y el infierno, son conceptos religiosos que pueden ser aceptados como dogmas de fe religiosa; pero esa sensación que uno posee, detrás del cogote, que te repite continuamente que tú por ser consciente, más que por ser inteligente, eres inmortal, acompañada de una extraña añoranza por un no sé qué olvidado te invade hasta la médula.


A base de meditar y soñar, la mera intuición se transforma en imaginación y la imaginación, tras un proceso de filtrado por el cedazo de la lógica y de la razón, se transforma en certeza. Una certeza que puede ir escalándose en niveles de consciencia inconsciente màs profundas. Así llegamos hasta el Conocimiento no aprendido pero olvidado que conocemos como Gnósis. 


El largo proceso hacia la Gnósis se denomina "Iluminación", y ésta es el fundamento de la verdadera Fe. Una Fe, férrea y profunda que no requiere de la necesidad de creer pues se trata de una Verdad tan profunda y evidente que se siente, como tal, en lo más profundo del Alma.


No te solicito que te conviertas en creyente de las ideas de nadie, sino en un un investigador de tu propio Misterio, pues la Gnósis, la verdadera, aparece tras el Conocimiento de nosotros mismos. Y ello conlleva el saber quiénes somos en verdad, de donde venimos, qué hacemos aquí; es decir, cual es nuestro Destino y, por último, como trascenderemos de ésta vulgar e ilusoria existencia.


En suma, el conocimiento de que somos seres eternos e inmortales que, por un accidente, perdimos nuestro verdadero Cuerpo, tomando el que tenemos prestado con el fin, primero, de recordar y, después, de recomponernos.


Que somos soldados, que estamos aquí para hacer la Guerra y destruir el Mundo. Un Mundo que, para una inmensa mayoría, se ha transformado en lo único existente, en su "Becerro de Oro"


Que nuestra finalidad es destruir lo viejo mientras recomponemos lo nuevo para, finalmente, regresar a nuestro añorado Hogar Celeste, tras haber vencido en una prolongada y costosa Guerra de carácter Cósmico. Porque si hay algo certero es del origen Cósmico de nuestra Consciencia y, por lo tanto, de nuestra esencia y verdadera naturaleza.


Aralba Pensator Minister, Frater R+C