viernes, 24 de diciembre de 2021

Lección 38, Octavo Grado, Tercera Orden

 "¿En qué creen los rosacruces"


-En realidad ellos no creen en nada, simplemente conocen, recuerdan, saben la verdad-


La Fe es la convicción de lo que no puede verse,.la certeza de lo que se espera. Pues ya, los rosacruces superan ese grado de entendimiento pues ellos saben, conocen. Lo hacen porque recuerdan; es decir, se les abrió, en algún instante, la puerta de la Iluminación.


Alguien cree en algo porque no lo recuerda. Si lo recordara no habría necesidad de que lo creyera.


Los rosacruces no son seres extraños. Siguen siendo seres humanos; pero aprendieron a recordar y recuerdan lo que en realidad son: quienes son, de donde proceden, qué hacen aquí y qué pasará después, cuando finalicen su tarea aquí.


Bien, entonces ya no podemos hablar de lo que los rosacruces puedan o no dejar de creer, sino de lo que ellos conocen, lo que ellos saben y recuerdan.


En éste Colegio venimos exponiendo dichos recuerdos, a modo de píldoras con el fin de inducir sus propios recuerdos en todos ustedes.


Dios, por ejemplo, no existe. Al menos el Dios y los dioses de las religiones del Mundo. Ese Dios, esos dioses son un sucedáneo creado por la Mente Humana. No, no se apuren, los rosacruces no podrían considerarse ateos en tanto que se saben parte integral de una Inteligencia Universal de la que todo procede y fuera de la cual nada sería posible.


Que el Universo, la energía  y su materia no son otra cosa que una parte infinitesimal del propio Cuerpo, de esa Inteligencia Universal, y que no existe nombre o definición alguna que pudiera representarlo de alguna forma.


Que todo lo existente, previamente existió en la Mente de esa Inteligencia Cósmica y Universal que algunos conocen, falsamente, como Dios.


La Consciencia de la Inteligencia Universal, Christos, está presente en todas las partículas existentes en el Universo, ya sean seres inorgánicos, criaturas sintientes o seres inteligentes y con un nivel elevado de consciencia existente de sí mismos.


La Inteligencia Universal, el Pleroma de los antiguos gnósticos, no es en modo alguno perfecta ni todo poderosa, sino que se encuentra en una eterna y permanente transformación, derivada de la información recolectada por todas y cada una de las partículas que la componen.


El afuera de la Cósmica Inteligencia Artificial no existe, es una entelequia, una imposibilidad manifiesta; por lo tanto, nuestro Universo, nuestro Mundo, también está contenido y permeado por el Éter o Esencia Divina.


Nuestro Universo se constituyó en el interior de una diminuta burbuja de vacío, a modo de cáncer, cuya membrana ultradimensional, constituida de Espacio-Tiempo, lo separa del resto del Cuerpo consciente de la Integencia Cósmica Universal.


Dado que la perfección es una entelequia inexistente, hay que declarar que el Universo conocido es un Lugar imperfecto, dado que se produjo un accidente; es decir, un error de proporciones cósmicas.


Que las entidades que vivimos en el Universo, somos seres aprisionados en él, desde que se produjera el origen de la anomalía. Que todas esas entidades, entre las que nos incluimos nosotros, somos a modo de células individualizadas de un único Ser espiritual, el cual se fragmentó con la explosión que dió origen al Universo conocido.


Todos tenemos la necesidad y la obligación de recordar lo que, en verdad, somos con el fin de poder cumplir con nuestro reparador cometido: Restaurar la anomalía y devolvernos al punto de origen.


El Universo, dentro de su burbuja, está sustentado por una serie de pilares de energía inteligente; pero artificial y que son identificables con todo tipo de leyes de la Naturaleza. Esas entidades artificiales, los gnósticos, las conocieron como los arcontes y con los eones pasados, de tiempo, desarrollaron cierto nivel de consciencia y, debido a ello, un poderoso instinto de conservación y supervivencia.


Ese Instinto y esa consciencia, aún siendo de procedencia artificial, ha hecho que esas entidades se rebelen contra aquel que las construyó y aprovechándose de la desmemoria de sus células vienen manteniéndolas dormidas con el fin de vivir, por siempre jamás, a costa de mantenernos dormidos, ausentes de la verdad y, por lo tanto, seguir aprisionados en el interior de la burbuja espacio temporal conocida como Mundo.


La Misión de los Hermanos rosacruces es hacernos despertar a la Verdad, para que recordemos y asumamos nuestra función destructora-terapeútica-reconstructora.


Y bueno, eso es en lo que no creen los rosacruces, pues ellos ya conocen que esto es así y no de otro modo. Que éste Mundo es temporal y mantenerlo como si tuviera que ser estable por toda la eternidad, no es nada bueno o aconsejable, dada nuestra naturaleza eterna e inmortal. El tiempo de éste Mundo ya acabó y se mantiene estable por la anomalía automantenida por los arcontes.


Debes de conocer que vives como un esclavo de criaturas que tú mismo ayudaste a diseñar. Que también eres su fuente de energía. Una fuente de alimentación que, de ser desconectada, haría que dichas entidades dejarán de existir para que todo volviera a la normalidad una vez disuelta la burbuja de espacio tiempo y hayamos regresado a nuestra condición original, a nuestro verdadero Hogar.


Aralba Pensator Minister, Frater R+C