martes, 16 de agosto de 2022

Lección 106, Octavo Grado, Tercera Orden

 "De Religión y Sentimiento Religioso"


-La Religión es una invención humana creada para explotar el Sentimiento Religioso-


A primera vista, no siendo muy exigentes en la analítica lógica, podría pensarse que el sentimiento religioso es consecuencia de la influencia religiosa; es decir, de la religiones; pero como veremos es justo al contrario.


El sentimiento religioso es inherente a la Naturaleza Humana, independientemente de que se traduzca en una creencia o descreencia en Dios. El Ateísmo también es una actitud religiosa; pero canalizada en contra de cualquier tipo de Creencia Religiosa y como consecuencia indirecta de Dios.


El Sentimiento Religioso es una suerte de añoranza por algo desconocido y que los seres humanos, por regla general, no sabemos explicar muy bien. Se trata de una suerte de dejavu de algo desconocido pero vivido con anterioridad y que, por algún motivo desconocido, se ha olvidado. 


Ese Sentimiento, como un eco lejano, nos susurra que no somos de aquí, que nuestro verdadero Hogar se encuentra en un Lugar muy lejano y que nuestro parentesco con lo que nos rodea se reduce, en exclusiva, a lo material.


Bien, esa añoranza o Sentimiento Religioso hace que elucubremos dándole vueltas a nuestra Mente intentando comprender de donde procede, que es lo que significa y por qué se produce. Esto, con el tiempo, ha dado lugar a una suerte de Pensamiento filosófico-metafísico primero que, mediante el interés y manipulación de algunos, ha terminado derivando en una pétrea construcción teológica, la Religión.


En realidad, el Sentimiento Religioso es independiente de la creencia en la Divinidad religiosa, ya sea ésta monoteísta o politeísta; pero, desgraciadamente ha sido utilizado, desde tiempo inmemorial, para conducir a las masas hacia la Religión con la única intención de controlarlas y manipularlas con el fin de conducirlas hacia fines interesados muy concretos.


Por regla general las religiones siempre han estado unidas a la Política de los Estados; es decir, la Religión, aunque les pese a algunos, es consustancial con el Estado y es un Órgano de Control de la Población aprovechando el Sentimiento Religioso que todos anidamos, de modo natural, en nuestros corazones.


Que el Sentimiento Religioso, en origen, no está vinculado a ninguna Religión es obvio debido a las naturales dudas que surgen en la mente humana respecto a cualesquiera de las religiones existentes. Las religiones son construcciones humanas desarrolladas bajo el punto de vista de un Individuo en particular o de un grupo de interés concreto, cuyo monolitismo es muy difícil de aceptar en su totalidad por todos y cada uno de los individuos de la colectividad.


Las personas, comprendiendo una parte importante de las doctrinas religiosas terminan aceptando el conjunto del contructo artificial, muy a pesar de las dudas doctrinales que siempre les acompañarán durante el resto de sus vidas. Esa es la causa principal de que no exista una única Religión, en tanto que su diversidad y variedad se debe al intento, sectario, de dar respuesta a todas las dudas de las que venimos hablando; de hecho, la existencia de tanta diversidad religiosa es la prueba palpable de que ninguna Religión es la verdadera y eso, no invalida al natural y legítimo Sentimiento Religioso individual.


Por supuesto que respetamos el Sentimiento Religioso de las personas, tan consustancial a ellas como pudiera ser la raza, el sexo o el carácter; pero nos negamos a respetar a las religiones establecidas por los diferentes estados o manipuladores sectarios, en tanto que son construcciones equivocadas desarrolladas con el mero objetivo de controlar y manipular a las personas, siendo por dicha causa que el verdadero Cristiano no se reconozca como miembro de una Religión. Si lo hiciera, estaría validando la existencia del resto de religiones como verdaderas y eso no puede ser.


El verdadero Cristianismo, el original, de los tiempos previos a los denominados como Padres de la Iglesia, no era una construcción homogénea doctrinal, dogmáticamente hablado sino que respetaba la religiosidad personal de cada individuo. Así, el Cristianismo no era homogéneo en sus tesis y las discusiones constructivas eran algo natural dentro de las comunidades cristianas primitivas. Esto cambió cuando el Cristianismo gnóstico original fue transformado, mediante la instauración de una Doctrina dogmática, en una Religión estructurada en torno a un punto de vista moral y de forma de vida determinada.


Es a partir de éste punto, con la Religión construida, cuando los individuos que viven dentro del ámbito de la Religión, que las personas son teledirigida hacia un objetivo común independientemente de la religiosidad particular e individual. Ahora todos deben de mantener un comportamiento moral idéntico, deben de consumir las mismas cosas y comportarse, disciplinadamente, respecto de la Autoridad, siendo Dios un mero referente de "Temor" (miedo) para evitar que el comportamiento religioso individual prevalezca sobre los dogmas de la Religión colectiva instaurada.


El Cristianismo deja de serlo en el instante en que se consuma la instauración de la Institución religiosa Cristiana.


Aralba R+C