miércoles, 12 de octubre de 2022

Lección 134, Octavo Grado, Tercera Orden

 "La Meditación en la Iniciación (Introducción)"


-Calmando el ruído mental-


De la Iniciación, tal y como se entiende en el "Colegio Invisible de la Rosacruz" es algo interior, personal, imposible de compartir e intransferible; en donde no suceden rituales o dramatizaciones "externas".


La Iniciación puede surgir sin ser buscada y, de hecho es lo más común; y en tanto que ésta se produce en el Mundo Onírico es factible preguntarse la función que posee la meditación en dicho proceso. Digamos que ésta puede utilizarse como un paso previo y preparatorio, en Estado de Vigilia, antes de sumirnos en los brazos de Morfeo, que es cuando se producirá, de producirse, la Iniciación.


A la hora de buscar al Maestro Interior, dentro de nosotros; es decir, después de haber enfrentado al obscuro y aterrador Guardián del Umbral y transformado, éste, en nuestro Santo Ángel de la Guarda e Instructor Crístico, dejamos claro que ese momento era la única y verdadera Iniciación posible; es decir, cuando se comienza el Proceso de Cristificación o Nuevo Nacimiento que finalizará  en el Acto final de la plena Transfiguración.


Aún siendo todo lo anterior correcto, vamos a proceder a dar unos leves apuntes de cómo podría ser una Meditación de cara a la Iniciación en cada uno de los nueve grados que conforman el Colegio Invisible de la Rosacruz, desde el Primero "Celador", hasta el Noveno "Mago"


Los apuntes que iremos entregando, durante los próximos días, queremos que puedan servir a modo de guía; pero nunca como algo rígido que hubiese que memorizar para realizarlo al pie de la letra. Todo lo contrario, nuestro deseo sería que cada uno de ustedes, basándose levemente en nuestros escritos, crearan sus propias y particulares meditaciones.


No se trata de que hayamos dividido la única Iniciación posible en nueve partes, lo cual sería ilógico y contradictorio; pero sí queremos aportar una base de trabajo para ir abriendo el Portal que comunica el Mundo de la Realidad con el de los planos internos. El Mundo de la Vigilia con el de los Sueños.


Será una suerte de preparación para interiorizar los misterios del Grado mediante el manejo de las Palabras Clave que ya se han aportado; pero dejando, también, libertad con el fin de que cada uno pueda aplicar a la Meditación, su propia impronta Personal.


A aquellos que no estén familiarizados con la verdadera Meditación hay que decirles que no se trata de cargar nuestra Mente de ideas y que al final solo terminarían produciendo ruído sino que, mediante un procedimiento progresivo, se consiga calmar la mente hasta llevarla al completo silencio. Es decir, la Meditación se produce solo durante la parte final del Proceso y que suele ser la más larga, desarrollándose en completo silencio tanto auditivo como mental. Si éste hecho, del silencio, no se produce deberemos de repetir el Ejercicio las veces que fuese necesario.


Ese proceso consiste en imaginar una serie de imágenes y actitudes nuestras, referidas a los significados clave de cada uno de los grados. Digamos que se trataría de un ejercicio preparatorio para enfrentarnos, victoriosos, con los acontecimientos del Mundo Onírico. Esto es fundamentalmente especial para aquellos que aún no han tenido la oportunidad de enfrentar al Ángel de la Ventana de Occidente (el Guardián del Umbral).


¿Quiere esto decir que su Iniciación efectiva se producirá tras recibirse en el Grado de Celador o en el de Mago?, ¡En absoluto!, La Iniciación, afanosamente, la busca la Personalidad; pero eso no quiere decir que la vaya a encontrar. La Iniciación se produce cuando aparece el Maestro; es decir, cuando el Alumno se encuentra preparado para convertirse en discípulo y, por supuesto, es dirigida por el Maestro Interno, nunca por la Personalidad.


Así, usted pudiera estar ya iniciado antes de conocer nuestro Colegio; podría iniciarse, durante su estancia en cualquiera de los nueve grados o podría hacerlo tiempo después de abandonar sus ejercicios espirituales en el Colegio. Como le decimos, no es algo que ni usted ni alguien ajeno a usted puedan controlar; pero está claro que mientras más preparado uno esté, antes uno se iniciará. Y, bueno, ese es el fín último que pretende está colección de nueve meditaciones y que supondrán, para nuestro Colegio, una suerte de sucedáneo de las dramatizaciones rituales, públicas, que suelen darse en muchas escuelas de misterios.


No se trata de menospreciar las supuestas iniciaciones dramatizadas sino de colocarlas en su verdadero contexto de ejercicios preparatorios para la auténtica Iniciación y que, en nuestro Colegio Virtual hemos sustituido por una serie de meditaciones guiadas; por cierto, meditaciones que cada uno deberá de elaborar producto de su imaginación con palabras suyas; ya sea memorizando el proceso o grabándolo en algún tipo de audio para después reproducirlo en el instante de la propia Meditación.


Estas meditaciones, en principio, están pensadas no para sustituir al Ejercicio de la Retrospección Nocturna diaria, sino para sustituirlo una sola vez, cada vez que vayamos a recibirnos en uno de los nueve grados del Colegio. Para que se entienda mejor vamos a poner un ejemplo: Imagínese que va a comenzar a estudiar las reflexiones o lecciones del Grado de Celador, pues el primer día u otro posterior si ya hace tiempo que lo comenzó, realiza la Meditación justo al acostarse como si estuviese realizando el Ejercicio de retrospección, en el instante antes de que le llegue el sueño. A partir de aquí, ya de forma inconsciente, el Ejercicio continuará una suerte de desarrollo automático que podrá, o no, desembocar en su efectiva Iniciación. Sí ha conseguido, al final, el silencio que se pretende no deberá de repetir dicho ejercicio, si ese no es su deseo.


La cuestión no consiste en cargarnos de muchos ejercicios espirituales que debamos de realizar todos los días, ocupando la mayor parte de nuestro tiempo, sino buscar la mayor efectividad posible compaginando los ejercicios diarios de retrospección Nocturna y Concentración matutina con una Meditación periódica que convierta nuestra Instrucción en algo más ameno y no tan rutinario.


También les aconsejamos, a la hora de desarrollar su particular visión de las meditaciones de grado, que se lean previamente las reflexiones que ya les hemos proporcionado respecto al Grado que les corresponda con el fin de activar su imaginación y que las ideas puedan fluir más fácilmente hacia ustedes.


Creemos que, una vez que todo el material se encuentre a su disposición, ya tendrán ejercicios espirituales de sobra, junto a la Oración y la Contemplación, como para ir entrenando su músculo místico, vamos, su espiritualidad.


Si se siente más cómodo recibiendo estas meditaciones u otras similares, en un Lugar Físico acompañado de otras personas e instructores, le aconsejamos que busque la Escuela Presencial que más se acomode a sus gustos y expectativas; pero desde aquí, le hacemos hincapié en que tal cosa no es necesaria; en tanto que, tanto nuestras meditaciones como las sesiones dramatizadas no dejan de ser otra cosa que muletillas, ruedines o llantitas; es decir, meras ayudas para afrontar la verdadera Iniciación. Nunca confundir ni la Dramatización Ritual ni la Meditación con la verdadera Iniciación.


Aralba R+C